Para los que me conoceis un pelín 🙂 no es ningún secreto que uno de mis cantautores favoritos -si no el que más- es Lluis Llach. Sus canciones me han acompañado siempre y a menudo, han llenado mi vida de sentido o me han ayudado a entenderla y a seguir luchando.
En una lista de correo alguién ha tenido la buena idea de recordarnos que ayer, hoy y mañana, (15-16-17) se cumplen 30 años de los conciertos que dió Llach en el antiguo Palacio de Deportes de Barcelona.
Unos conciertos de los que salió un disco en directo “Barcelona. Gener de 1976″ Cuando lo escucho y lo recuerdo, aún me emociona.
El ambiente que se respiraba, que se vivía por aquellas fechas, será por siempre irrepetible. Sonará a tópico pero estoy seguro que jamás volverá a vivirse un estado tal de complicidad ciudadana.
Hacía dos meses escasos de la muerte del dictador y el país estaba tomando presión por momentos como una olla a presión.
Hablamos de una etapa ciertamente difícil pero llena de ilusiones y esperanzas.
Las canciones a coro: cantante y público al tiempo y el lema más gritado y coreado de por aquel entonces, el que había salido de l’Assemblea de Catalunya (organización que agrupaba a partidos políticos en la clandestinidad todavía, sindicatos de trabajadores y de estudiantes, intelectuales, artistas, etc. etc…) :
“Llibertat, Amnistía i Estatut d’Autonomía”
Libertad para un país que llevaba 35 años bajo una dictadura férrea; Amnistía para tantos luchadores antifranquistas que estaban encarcelados por defender sus ideales democráticos, y Estatut d’Autonomía para una nación que quería recuperar sus instituciones de autogobierno.
Creo recordar que fuí al segundo de los conciertos, el del 16. La noche anterior, al terminar el recital, algunos centenares de persones se dirigieron hacia la cárcel “Modelo”, bastante próxima para hacer llegar a los presos políticos su solidaridad.
Incluso antes de llegar fueron dispersados por los “grises” la antigua Policia Armada.
Así qué, al terminar el siguiente recital, el camino estaba marcado: -Todos a la Modelo.-
Unos andando y los que teníamos coche, con este, para dificultar la movilidad de los “grises” y hacernos oir y acompañar con los claxons.
Para que decir el “acojone” que llevábamos (yo al menos….) pero había que ir….. y se fué.!
Fué el preludio de las manifestaciones de los días 7 y 8 de febrero de aquel año y de muchas más……
Igual es que últimamente estoy bastante pesimista, a la luz de como han ido estos últimos 30 años; de como -y lo poco- que ha evolucionado la mentalidad democrática en buena parte del estado; de como los hijos del franquismo han llegado a gobernar durante 8 años y siguen manipulando el país desde los centros del poder -y no sólo desde los mediáticos- y donde han ido a parar aquellos ideales de un estado federal -o cuasi- que muchos esperábamos.
Si nos llegan a contar eso entonces, me pregunto si muchos no nos habríamos quedado en casa viendo la tele. Aquella tele (la única) en blanco y negro de José Mª Iñigo y los teleñecos: Vamos a la cama…….
Que es lo que voy a hacer ahora mismo. 🙂